El pequeño morterense sufrió gravísimas quemaduras en el 50 por ciento de su cuerpo el pasado 12 de julio, cuando intentó avivar el fuego de una salamandra.

El sábado, luego de cinco meses en Córdoba, volvió a su casa Luciano Borda, el pequeño de 8 años que el 12 de julio sufrió gravísimas quemaduras en su cuerpo cuando manipulaba una salamandra en su casa.

Sus familiares, amigos y toda la comunidad de Morteros celebró esta noticia porque su lucha, las oraciones y el cariño de todos promovieron el milagro.

Cansado pero feliz Lucianito fue recibido en su casa con pancartas y una fiesta de bienvenida.

Guadalupe Gonzáles, su mamá, que junto a su hermana Sharon acompañaron al pequeño en los momentos más duros, no se cansa de agradecer y sonreír.

“Estamos viendo como se hace de ahora en más, porque la casa es pequeña, la silla muy grande y es difícil desplazarla, pero todo es para ir aprendiendo con Lucianito. Estamos en casa y super felices”, expresó.

Con gran fortaleza Guada reconoció que “fueron cinco largos meses donde tuvieron que trabajar conmigo, con muchísimo apoyo psicológico porque tenía que estar entera para Lucianito sabiendo que aquí dos niños también la estaban pasando mal y me necesitaban”.

Mirando hacia adelante con la misma fortaleza del pequeño guerrero, admitió que “ahora tenemos un trabajo en familia, con mucha contención y como mamá me tengo que armar de mucha paciencia y enseñarles a sus hermanos del respeto a Luciano especialmente cuando él no quiere algo”.

Para Guada estos meses y lo que vendrán son de aprendizaje porque “uno nunca espera tener un hijo en las condiciones en las que está hoy Lucianito, que va a salir, pero hay que trabajarlo para que él pueda tener una vida de niño normal que la va a tener”

A Luciano le espera una larga rehabilitación que le permita volver a caminar.

“Todavía tiene mucha rigidez en las piernas pero le estoy explicando a los hermanos como ayudarlo y cada logro que vemos en él lo festejamos como un gol de Messi”, expresó.

A medida que pasen los días la familia irá notando cuales son las necesidades de Lucianito para una mejor calidad de vida. Hace pocos días recibieron la donación de un aire acondicionado pero se necesita otro para lograr una mayor independencia dentro de la casa.

También es necesaria una silla de ruedas de niño porque el espacio para moverse es muy reducido, y un aparato de ultrasonido pouser sveltia que será de gran utilidad para mejorar las condiciones de su piel.