La mujer de 33 años, madre de tres hijos fue asesinada a golpes por su ex pareja, José Alberto Córdoba de San Guillermo. Su hermana consideró que “es un capítulo que no cierra nunca”. "El dolor es insostenible”, remarcó

El 5 de abril de 2018 una comisión integrada por personal de la PDI, Guardia Rural Los Pumas, Bomberos, personal de canes de la policía de Santa Fe y Agencia de Trata de personas, halló el cuerpo sin vida de María Luisa Retamozo, de 33 años, en un monte ubicado a uno 10 kms de Suardi.

El cuerpo de María Luisa presentaba múltiples golpes y su deceso se produjo el mismo día de su desaparición, el 21 de marzo de 2018.
La causa fue investigada por la Fiscal de San Cristóbal, Silvina Verney, quien dictó la detención de un hombre oriundo de San Guillermo, José Alberto Córdoba, con quien María Luisa habría tenido una relación.

El hombre había sido sindicado por los familiares al momento de hacer la denuncia y aportar datos en la búsqueda de encontrar a Retamozo.

Córdoba fue detenido e imputado por homicidio calificado con alevosía y lesiones producidas con anterioridad, esto por una causa de golpes de puño radicada el 27 de abril de 2015 y otra por utilización de una moto guadaña para lesionarla el 9 de febrero de 2016. No fue caratulada como femicidio

 

“El dolor es insostenible”

“Los 21 de cada mes y más en marzo cuando se cumple un nuevo aniversario, el dolor es insostenible”, expresó Cecilia, la hermana de María Luisa Retamozo, que durante la desaparición de María se armó de fortaleza y salió a golpear puertas, organizó marchas sintiendo íntimamente que algo malo había pasado y sindicaba como responsable a Córdoba, ex pareja de su hermana.

“Ese 20 de marzo de 2018 ella estuvo en mi casa comiendo conmigo, con mi familia y que el 21 haya desaparecido es algo que tengo grabado siempre en mi mente, y cada 5 de abril –día en que la policía encontró el cuerpo- es volver a recordar todo”, rememoró

Cecilia repasa aquellos días desde la desaparición de su hermana y siente que hubo una cadena de “errores”. “Nunca vamos a entender porque el 21 de marzo en Suardi no nos tomaron la denuncia, el 23 volvimos pero tampoco la tomaron y terminamos haciéndola en San Guillermo, hasta el día de hoy tengo que saber porque”, manifestó.

“Nosotros nos cansamos de pedir que investiguen a Córdoba, le pedíamos que lo detengan, pero nos decían que no tenían pruebas suficientes pero apenas apareció el cuerpo de mi hermana lo detuvieron”, dijo Cecilia, manifestando que “hay tantas cosas que no entendemos, no tenemos medios y eso también complica la cosas. Te pasan por encima como quieren”.

Es que aquel 5 de abril Cecilia se enteró por las redes sociales que habían hallado el cuerpo sin vida de su hermana algo que quedará para siempre grabado en su memoria, una mezcla de injusticia e impotencia. “Nadie nos avisó, abrí el Facebook y ahí se nos paralizó la vida”, admitió

La vida de todos cambió ese 5 de abril de 2018. María tenía tres hijos, dos de ellos, de 17 y 13 años, este último con una discapacidad, que viven con su abuela materna y la más pequeña de 10 años que vive con su padre

“Además de todo el dolor que acarrea mi mamá por la pérdida de su hija en estas circunstancias tan terribles, está pasando una terrible situación económica porque no cobra asignación y está sin trabajo. En su momento tuvo ayuda del Municipio de Suardi, de la gente, pero pasa el tiempo y todo se enfría”, expresó Cecilia que vive en Morteros, tiene cuatro hijos, y vive con pocos recursos, pero aun así ayuda a su madre y sobrinos como puede.

La familia de María se hizo añicos, sus hijos quedaron solos y sin recursos.

“Hace poco me enteré de la Ley Brisa que es una reparación económica para los hijos de madres víctimas de violencia de género, pero tengo que ir a San Cristóbal para ver cómo debe tramitarse pero por ahora no reciben ningún aporte”, cuenta Cecilia que muchas veces con la colaboración de Damián Assis de Radio República logra juntar mercadería para su madre y sobrinos.

“La situación de aislamiento que vivimos en la actualidad complica aún más la vida de todos”, enfatizó.

 

“La causa se mueve si nosotros nos movemos”

Cecilia sabe poco del avance de la causa. “Parece que la causa se mueve si nosotros nos movemos y lo único que estoy pidiendo es justicia y hablar con la Fiscal”, explicó

“Fui solo a una audiencia y tuve oportunidad de hablar con la Fiscal”, afirmó Cecilia sintiendo la falta de escucha estatal, la soledad y la imposibilidad que da la falta de recursos porque la familia no tiene abogado que los represente.

“En su momento me acusaron de entorpecer la búsqueda porque yo hice circular una foto de María al momento de su desaparición”, recuerda con dolor.

“Este año después de la feria hablé a la fiscalía y pedí un turno para reunirme con la fiscal de San Cristóbal, Silvina Verney, pero lamentablemente ocurrió esto de la cuarentena y todo sigue igual”, dijo Cecilia que quiere ser querellante en la causa para lograr que sea caratulada como femicidio”.

 

“Es un capítulo que no cierra nunca”

Los femicidios son una tragedia cotidiana en todos los puntos del país. El cálculo no se estanca y se actualiza hora a hora. “Abrís las redes o prendes el televisor y siempre hay un nuevo caso de una mujer asesinada, veo marchas pidiendo justicia y me veo también en esos días reclamando, es algo muy doloroso. No se puede explicar, es un capitulo que no cierra nunca, quizás para la gente se cierra pero para nosotros que lo vivimos en carne propia no”, señaló.

“Pasa el tiempo y la gente se olvida pero nosotros jamás podremos olvidar”, reconoció.

Han pasado dos años y la herida sigue intacta, pero a pesar de todo Cecilia no se cansa de agradecer el apoyo de la comunidad de Suardi por aquellos días difíciles que la sostuvieron con marchas pidiendo justicia y presionaron para acelerar el accionar de la justicia. “A la gente de Suardi que conoce la situación que vive mi mamá con los hijos de mi hermana les agradezco su acompañamiento y hoy les pido que le den una mano porque por más que hayan pasado dos años esto ha cambiado para siempre nuestras vidas”, indicó

“También quiero decirle a quienes está pasando una situación de violencia como mi hermana que no se queden callados porque después son ellos y sus familias las que pagan las consecuencias”, expresó Cecilia también dedicando unas líneas a quienes entorpecieron la búsqueda de su hermana cuestionando su forma de vida o hablando de más “es importante primero mirarse uno antes de juzgar a los otros”