Sumándose a la iniciativa de la escuela ProA de Rio Cuarto y la UTN, la escuela ProA de Porteña fabrica máscaras de protección con su impresora 3D para los profesionales del Centro de Salud local.

La emergencia sanitaria provocada por el coronavirus ha llevado a las instituciones educativas a unirse, compartir experiencias y fabricar distintos elementos que ayudan a la prevención y el cuidado frente a esta pandemia

En el caso de Porteña, la escuela ProA comenzó a construir mascarillas con su impresora 3D para los profesionales del Centro de Salud local

“Para nosotros era un poco complicado iniciar la fabricación porque los profes de programación son de San Francisco y en la localidad tenemos solo una docente”, comenzó explicando Emanuel Sueldo, que por su cargo como director de Deportes de la Municipalidad de Porteña conocía de la necesidad de esta protección a través de la directora de salud municipal.

A pesar de esta realidad, el proyecto comenzó a gestarse y el trabajo conjunto de la Coordinadora de Escuelas Experimental ProA sede Porteña María Elida Raftaco, de los profesores Laura Grosso y Emanuel Sueldo, asesorados por el Profesor Pablo D’Aversa del IPET 429 de Seeber, en la tarde del jueves se pudo culminar la primera máscara para protección

“El día miércoles comenzamos a trabajar con los insumos que nos proveyó el Municipio y hoy hicimos la primera mascara para los profesionales del Centro de salud”, explicó orgulloso Sueldo

La institución educativa cuenta con una sola impresora 3D por lo que estiman solo podrán fabricar dos máscaras por día ya que la realización de cada máscara demanda unas cuatro horas de producción.

Actualmente el Centro de Salud Municipal tiene una demanda de 20 a 25 mascaras como para comenzar por lo que el docente pidió que “si alguien cuenta con impresoras 3D y está dispuesto a colaborar desde la institución veremos la manera de acercarles los software que se necesitan y el diseño de las piezas para que puedan realizar la impresión, luego el ensamblado de las partes se harían en el colegio”, dijo el docente agregando que “la máscara es muy simple y de muy bajo costo, no llega a los cien pesos”

“La máscara está compuesta de cuatro partes, en la parte superior tiene una vincha con filamento plástico que es lo que la máquina derrite para hacer la pieza y en la parte inferior tiene una pieza del mismo material que le da un sostén a una plancha de acetato de 24 cm de largo que es lo transparente que le hace la protección y en la parte posterior de la vincha tiene el estático de protección para que no se caiga pero la máscara es muy apretadita”, describió

“A raíz de las publicaciones nos contactaron de la Municipalidad de Freyre que nos han pedido 15 máscaras y también algunos particulares nos lo han pedido”, adelantó Sueldo.