El viernes se convocó a los socios para ponerlos en conocimiento de la situación económica e institucional de la entidad que actualmente se encuentra acéfala. Buscan conformar una Junta Normalizadora

Durante la tarde del viernes se llevó adelante una importante reunión de socios del Centro de Jubilados de Morteros, en la búsqueda de poner fin a la situación irregular que atraviesa desde hace varios años y que genera gran preocupación entre la comunidad.

En los últimos años, un buen número de socios junto a casi la totalidad de la Comisión Directiva se retiró del centro. Actualmente un grupo de socios tomó la posta en la búsqueda de reflotar la institución.

Durante la reunión del viernes estuvo presente Ramón Esquivel, representante de la Comunidad Regional Adultos Mayores. “Me encontré con que el centro estaba desmandado y manejado prácticamente por el PAMI”, dijo Esquivel respecto a su impresión de lo que ocurrió. “Creo que se confunde Programa con institución, el PAMI puede entregar los bolsones en la sede pero no entrar en la vida institucional”, manifestó Esquivel

Marcó la importancia de la reunión al considerar que “es necesario que los jubilados conozcan dónde están parados y cuáles son sus derechos, porque acá perdieron el poder que tenían, se los dejaron quitar por pelear y no ponerse de acuerdo”

“Los únicos que tienen derecho a manejar el Centro son los jubilados”, dijo Esquivel.

Por su parte Norberto Viarengo desde el Centro de Jubilados de Morteros explicó que “estuvimos indagando la situación del centro y descubrimos que la comisión directiva se encuentra acéfala debido a que sus miembros renunciaron”

“Hay un grupo de gente que quiere normalizar el Centro, entre los que me encuentro, pero hay otro grupo que está guiado o manejado desde afuera por una institución nacional con representación local, el PAMI, que ha tenido mucha injerencia en el Centro de Jubilados”.

Viarengo relató que “esta situación no corresponde porque el Centro de Jubilados se debe a Inspección de Personaría Jurídica del Ministerio de Gobierno de Córdoba, no hay otra institución a la cual se deba“.

Según explicó el jubilado, “el centro está pasando por una situación muy crítica, muy difícil” y por eso se convocó a todos los socios “para que entre todos le encontremos una solución”

Viarengo dijo que esta situación de mal manejo administrativo lleva 4 años. “Existe una falta de recursos debido a que los socios se retiraron, además de la falta de eventos para generar recursos. Existe una deuda grande con el único personal administrativo que hay, una deuda atrasada con Afip, con obras sociales y con sindicatos”

Para el grupo que integra Viarengo solo hay dos caminos posibles: cerrar el centro o conformar una junta normalizadora que termine con la elección de una nueva comisión directiva, que es concretamente a lo que ellos apuntan.

“Las soluciones son, por un lado cerrar las puertas, disolver el centro por acefalia, falta de pagos y recursos, que es lo que no queremos y por otro, poner el hombro mínimo 20 personas que es lo que establece el Estatuto para que continúe el centro desarrollando sus actividades y buscando una salida a esto, que es nuestro objetivo, salvarlo”

Manifestó que “la deuda en este momento es más de 600 mil pesos”.

“Los estatutos son claros y precisos respecto a la parte dirigencial del centro”, indicó Viarengo apuntando a la referente de PAMI. “Con los únicos que tiene que manejarse el Centro es con sus asociados y sin ningún tipo de injerencia de ninguna institución de afuera y menos de una institución de nivel nacional, porque depende de la provincia de Córdoba”, señaló

Para normalizar el centro el primer paso será nombrar a tres personas que integren una Junta Normalizadora para ordenar institucionalmente al Centro en sesenta días y después será esa Junta Normalizadora la que convoque a una Asamblea General para elegir una Comisión Directiva

 

De los 1420 socios solo 200 abonan la cuota actualmente

La situación conflictiva del centro llevo a la deserción de un gran número de socios. Algunos renunciaron y otros simplemente dejaron de pagar sus cuotas.

“Uno de los problemas más graves que tiene el Centro es que los socios se fueron alejando y al alejarse dejaron de pagar la cuota social, pero como no hay renuncia escrita, todas esas personas que se alejaron son morosas del Centro”, advirtió Viarengo.

Confirmó que “en este momento el Centro tiene 1420 socios de los cuales solamente 200 pagan la cuota societaria”. “Ahí está el grueso de los ingresos que le falta al Centro de Jubilados”, insistió.